Hay muchas clases de nervios, los de antes de un examen, nervios por curiosidad, miedo...
La semana pasada experimente una clase de nervios que nunca antes había tenido. Mis compañeros Daniel Vacas, Iván Aneas y yo, asistimos a la radio por la mañana, en la que dispondríamos de media hora más o menos para que hablásemos de lo que quisiésemos, nosotros solos. El hecho de ir solos, sin Aitor, el que probablemente habría sido nuestro único apoyo allí, me acojonó bastante.
Cuando llegamos allí y nos sentamos, todo iba bien, hasta que Carolina nos presentó, entonces comenzaron esos nervios; me empezaron a sudar las manos, tenía frío pero a la vez no,¡nunca me había pasado eso! Pero una vez empezamos a hablar sobre nuestro tema de debate, todo empezó a calmarse y lo veía todo más claro, ese frío pero no frío empezó a retirarse, al igual que el sudor de las manos.
Sin duda es una experiencia que volvería a repetir, es cierto que al principio estaba bastante cagada por si algo salía mal, pero cuando salí de allí estaba feliz porque aunque a lo mejor pudimos cometer unos pequeños errores, todo salió bien, y lo mejor es que pudimos reivindicar nuestros pensamientos y mucha gente pudo oírlo, también es verdad que la mayoría de esa gente son los viejecillos que no tienen nada que hacer en sus casas y escuchan la radio por hacer algo, pero también espero que nuestros pensamientos no solo llegaran a ellos y llegaran a mucha más gente que este de acuerdo con ellos, y que también busque un cambio.
Buenas victoria,
ResponderEliminarNosotras también asistimos a la radio la semana pasada y yo también tuve muchos nervios.Y decirte que hay muchas más personas que escuchan la radio no solo los abuelillos y que la radio es una gran oportunidad para escuchar pensamientos diferentes a los tuyos o incluso iguales. y por último,, Quería decirte que lo hicisteis muy bien que enhorabuena por el trabajo. Y que no se te noto nada los nervios.
Un saludoo!!! :)